Qué es el TDAH
Definimos el TDAH por siglas como el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad, un trastorno neurobiológico común que afecta especialmente a los niños en edad escolar y cuyos síntomas persisten hasta la edad adulta, hasta en un 60 por ciento de los casos. El TDAH en adultos y en niños tiene causas genéticas y se da en algunas familias más que en otras. Una afección crónica que afecta a personas de todas las edades e igualmente a mujeres y hombres.
Lo cierto es que diferentes portales autorizados estadounidenses contemplan que este trastorno de déficit de atención con hiperactividad (TDAH) registra una mejora de la hiperactividad a medida que un niño se hace adolescente, pero los problemas de falta de atención, desorganización y mal control de los impulsos continúan hasta que se hacen adultos. El tratamiento habitual es mediante fármacos que prescriben solamente un especialista pero existen terapias que también ayudan a mejorar en este sentido.
Cabe destacar que la única persona calificada para la evaluación y diagnóstico del TDAH en adultos, que requiere un tratamiento prioritario, o en niños según recuerda la doctora Elena Díaz de Guereñu es un profesional de la salud cualificado tal como un médico – psiquiatra, neurólogo, médico de familia o pediatra- o un psicólogo clínico.
Así se manifiesta en adultos
Según las informaciones proporcionadas por la Fundación Cantabria Ayuda al Déficit de Atención e Hiperactividad (Fundación CADAH) para el diagnóstico de un TDAH en adultos es necesario que se presenten desde la infancia y con un mínimo desde los 7 años. Además, el sujeto debe mostrar una alteración clínicamente significativa o un deterioro en más de dos áreas importantes de su actividad como el funcionamiento social, laboral, académico o familiar. Suele manifestarse el TDAH en adultos como gestos de inatención y de impulsividad, ya que al hiperactividad disminuye con la edad.
A diferencia del caso de los menores, el adulto con TDAH muestra síntomas subjetivos de inquietud para manifestar la hiperactividad, al igual que la predilección por los trabajos movidos, hablar en exceso o sentirse agobiado y acelerado. Como síntoma de inatención se muestra la dificultad para permanecer atento, la facilidad para distraerse o ser olvidadizo, mala concentración, manejar mal u organizar mal el tiempo, olvidarse de dónde coloca las cosas y presentar dificultades para hacer una tarea. También destacan síntomas de impulsividad en adultos con TDAH al conducir demasiado rápido, cambiar de trabajo de forma impulsiva o por su irritabilidad o entrar en cólera con suma sencillez.
Cabe destacar que la doctora Díaz recalca la existencia además de tres subtipos principales de TDAH en adultos y en niños:
- Subtipo predominante inatento:
Dificultad con la organización, atención y seguimiento.
- Subtipo predominante hiperactivo/impulsivo:
Dificultades con el control de los impulsos, inquietud y autocontrol:
- Subtipo combinado:
Falta de atención, impulsividad e inquietud.
Terapias
El Instituto de Salud Mental de los Estados Unidos (NIMH, por sus siglas en inglés), recuerda que no existe una cura para el trastorno de déficit de atención con hiperactividad (TADH) en adultos ni en niños, pero sí la existencia de una serie de tratamientos que ayudan a reducir los síntomas y mejorar el funcionmiento. Se trata con medicamentos, educación o capacitación, psicoterapia o con una combinación de tratamientos.
En lo que respecta a los medicamentos, brevemente añadimos que se emplean para reducir los síntomas de este TDAH en adultos a través de estimulantes, no estimulantes y antidepresivos. Pero nosotros vamos a centrarnos en los otros tratamientos. Y es que se han valorado diferentes tipos de psicoterapia para el trastorno de déficit de atención con hiperactividad que ayuda a los pacientes y a sus familias a lidiar mejor ante los desafíos diarios.
Para un adulto con TDAH, el tratamiento más allá de los fármacos puede servirle para aprender a organizar su vida con tácticas que incluyen aprender a mantener rutinas y dividir las tareas grandes en tareas más sencillas y manejables.
Además, algo importante para las familias o personas cercanas al adulto con TDAH es que sepan reforzar y recompensar el comportamiento positivo, algo en lo que puede ayudar un especialista. También existen técnicas para manejar el estrés y herramientas para hacer frente a la frustración o grupos de apoyo con personas de inquietudes similares para saber solventar los problemas.
FUENTE:
Web de la doctora Elena Díaz de Guereñu
Instituto Nacional de Salud Mental de Estados Unidos