El golpe de calor- también llamado hipertermia o insolación, ésta última mediante radiación solar- es considerado como un grave trastorno que se produce cuando un organismo homotérmico no disipa la necesaria cantidad de calor que debe generar y absorber.
En la mayoría de las ocasiones, esto se produce por una prolongada exposición a una fuente calorífica. Concretamente, se considera hipertermia en el momento en el que la termperatura del cuerpo rebasa los 41ºC.
Los principales síntomas son mareo, deshidratación y desorientación, sequedad o dolor de cabeza, entre otros. Por ello, es de vital importancia tener unos conocimientos básicos para poder combatir un golpe de calor.
Beber frecuentemente agua o líquidos, sin esperar a tener sed, salvo indicación médica contraria así como hacer comidas ligeras que te ayuden a reponer las sales perdidas por el sudor.
También, evitar las bebidas alcohólicas como el café y el té o protegerse del sol así como mojarse o refrescarse de manera continuada para que el cuerpo consiga no perder tanto líquido.
Por otra parte, se debe evitar el no requerimiento de esfuerzos y actividades deportivas en horas de alto calor. Por último, se recpmienda la utilización de cobertores para la cabeza así como un calzado ligero que transpire.