El doctor Jesús Garrido, pediatra con más de 25 años de experiencia, se ha especializado en alergología para tratar con un enfoque integral las intolerancias y alergias infantiles
Teniendo en cuenta que en España hay unos 6 millones de personas menores de 14 años, los datos indican que hay unos 795.000 niños con algún tipo de alergia y 397.000 con asma, según un estudio de Archivos de Bronconeumología, la revista de la Sociedad Española de Pneumología y Cirugía Torácica (SEPAR). De hecho, un gran porcentaje de las visitas pediátricas a médicos especialistas están relacionadas con problemas derivados del asma o la alergia como bien sabe el doctor Jesús Garrido, coordinador de pediatría del Hospital Vithas Granada.
Para abordar estas patologías desde un nuevo enfoque ha dado un paso en su carrera especializándose como alergólogo infantil. Actualmente ofrece en el Hospital Vithas Granada un servicio específico para el tratamiento de alergias pediátricas. «A la hora de abordar un problema la súper especialización tiene sus ventajas, pero también tiene una desventaja y es que cada médico trata una patología, pero ¿quién se dedica a tratar el sistema defensivo mal regulado? Pues no lo hace nadie. Entonces el dermatólogo le manda cremas para la dermatitis atópica, el neumólogo le manda aerosoles para la bronquitis y el alergólogo las pruebas de alergia. Y yo como pediatra de cabecera de esos pacientes veía que se le estaban aplicando un montón de tratamientos que son soluciones para los síntomas, para las distintas manifestaciones de un mismo problema, en el que nadie está abordando el origen. Ahora me planteo las cosas desde un planteamiento global» explica el doctor Garrido.
«Se pueden hacer cosas diferentes que nos lleven a soluciones mejores para el paciente. Podemos tratar la patología alérgica basándonos, no solo en protocolos, sino en la evidencia científica que tardará años en ser introducida en esos protocolos. Esto nos va a permitir un salto en la calidad de vida en el paciente y en el pronóstico de la patología porque si nos vamos al problema de base se puede cambiar la regulación del sistema defensivo, podemos hacer inmunomodulación».
Inmunomodulación
Con esta nueva terapia previa a la inmunoterapia vemos que las reacciones adversas son menos frecuentes e intensas y simultáneamente mejoran todas las manifestaciones de la alergia porque vamos al origen y en el futuro tendremos menos posibilidades de desarrollar nuevas formas de alergia. Es en ese momento cuando entra en juego la inmunomodulación, que consiste en el uso de estrategias para equilibrar la respuesta del sistema defensivo que estaba alterado por distintas causas.
Tras formarse como alergólogo infantil ha puesto en marcha este servicio específico para el tratamiento de las alergias con un enfoque integral. «Decidimos dar el paso de organizar un servicio en el que tratamos esta patología basándonos, no en los protocolos que se utilizan en todas partes y que conozco y he aplicado también, sino en la inmunomodulación para regular ese sistema defensivo y haciendo que el niño tenga un desarrollo normal. Este abordaje se basa en modificaciones de hábitos como mejorar la exposición a la naturaleza, reducir el estrés del niño, mejorar la calidad del sueño, eliminar el azúcar de la dieta, tomar probióticos y algunos medicamentos que pueden reconducir al sistema defensivo. «Si modulamos el sistema defensivo vemos que el niño no mejora de una patología, sino de todas. En niños pequeños con sistemas defensivos moldeables podemos reconducirlo para que este sea un aliado a lo largo de su vida» indica el doctor.
También recalca la importancia de dejar que los niños se ensucien jugando al aire libre y tengan contacto con mascotas. «Si tienes perro hay un 33% menos de posibilidades de ser alérgico, si tienes dos perros un 66% y si tienes tres perros en casa un 99% menos de posibilidades» apostilla.
Además de todos estos hábitos de alimentación y de estilo de vida se utilizan medicamentos que no son inmunodepresores, son inmunomoduladores, lo que permite reducir muchísimo el consumo de corticoides e incluso suprimirlos. En cuanto a la alimentación el doctor Garrido recomienda reducir todo lo posible el consumo de azúcar y reforzar el microbiota con probióticos. «No todos son iguales. Dependiendo de cuál es el problema que tengamos podemos utilizar unos u otros. Se personalizan por problemas». Por ejemplo, para mejorar la inmunidad de los niños que empiezan la guardería, utiliza tres tipos de probióticos: Saccharomyces Boulardii, AB21 y estreptococo salivarius; competidores naturales de los hongos, virus y bacterias que generan las principales infecciones. «Con esta combinación logramos que cada niño tenga un ecosistema más estable y tenga muchas menos infecciones y que sean menos intensas». Este nuevo abordaje de las alergias de los niños arroja ya resultados muy esperanzadores. Por la consulta del doctor Garrido pasan a diario decenas de familias que han encontrado en la inmunomodulación una respuesta integral a los casos de dermatitis atópica, catarros, bronquitis, asma, rinitis, alergias alimentarias… a los que se enfrentaban sus hijos y que eran tratados por especialistas de diversa índole, pero sin un enfoque global. Con la puesta en marcha de esta consulta Vithas amplía su cartera de servicios para dar la mejor respuesta a las necesidades de sus pacientes. «Es una tendencia que irá en aumento porque estamos demostrando que con un enfoque integral conseguimos grandes resultados».