Según una investigación publicada en la revista médica Heart, trabajar horas excesivas daña la salud cardiovascular de las personas porque provoca un aumento de las pulsaciones y la presión sanguínea.
El peligro radica en que la presión puede permanecer alta durante largos periodos de tiempo y esto sucede, especialmente, a los hombres de mediana edad con un intenso ritmo de trabajo, independientemente de que realicen trabajo físico o no.
Sin embargo, los investigadores recuerdan los beneficios de una actividad física moderada y regular en la mediana edad, lo que contribuye notablemente a mejorar la salud cardiovascular.
Para la investigación, realizada por el Centro Nacional de Investigaciones de Dinamarca, se midieron durante 30 años los niveles físicos y de salud cardiovascular de 5.000 hombres daneses de entre 40 y 59 años que trabajaban en 14 compañías diferentes.
A los participantes se les sometió a pruebas de pedalear en una bicicleta estática para demostrar lo en forma que estaban, dato que se comparó con las horas que cada individuo trabajaba al día.
Más de dos tercios trabajaban entre 41 y 44 horas semanales y casi uno de cada cinco pasaban en el trabajo más de 45 horas.
Entre los hombres que demostraron no estar lo suficientemente en forma, los que trabajaban más de 45 horas semanales presentaron el doble de probabilidades de morir de un ataque cardíaco que quienes trabajaban menos de 40 horas por semana.
La subdirectora del Fórum Nacional de Corazón -que agrupa a 65 asociaciones médicas-, Jane Landon, señaló que los hombres de mediana edad tienen que mantenerse físicamente en forma mediante actividades de intensidad moderada, como pasear, montar en bicicleta o incluso hacer jardinería o bricolaje