En la actualidad, tanto la medicina convencional como los últimos avances de la ciencia médica, compatibilizan esfuerzos para ayudar a los humanos que pueblan el globo. Desde Asia, concretamente China, algunas de sus artes marciales más veneradas y demandadas como el Tai Chi, se asientan como una de las principales terapias para muchos de los enfermos que sufren algún trastorno mental.
Los últimos estudios revelan que las cualidades terapéuticas de este arte marcial fomentan la coordinación, el equilibrio, la flexibiliad o la movilidad de las articulaciones. Pero también potencian las capacidades cognitivas y las de comportamiento. De hecho, en la Unidad de Gestión Clínica de Salud Mental del Hospital Regional Carlos Haya de Málaga, lo vienen poniendo en práctica desde mediados de este año, y la cosa funciona.
Según un comunicado del propio complejo hospitalario y publicado por europa press, durante las sesiones cuya duración no sobrepasa la media hora, también se ahonda en la potenciación de la relajación, respiración y juegos grupales. La consecución en los pacientes de una progresiva sensación del bienestar personal, tanto a nivel físico como mental, según los responsbles de esta iniciativa, disminuye la ansiedad y el estrés.
Desde su puesta en marcha, los pacientes se han integrado en las clases aprendiendo movimientos suaves, lentos y coordinados y posturas que potencian su psicomotricidad, expresión corporal y su nivel de atención y concentración, versa la información. Esta práctica marcial ha dejado de ser una mera moda pasajera a una realidad terapeutica. Cada día son más los que se acercan a esta práctica para potenciar su calidad de vida.
Este arte marcial, como otros a los que principalmente occidente empieza a acoger, frena el avance de cierto tipo de problemas de cardiovasculares. Según un estudio llevado a cabo por la Universidad de Illinois en Hong Kong y publicado recientemente, el Tai Chi reduce la propensión a sufrir un derrame cerebral. Y es que la sincronización de la conciencia y los ejercicios corporales integran un todo positivo en el cuerpo que no deja libre ninguno de los puntos del mismo.
De hecho, este arte marcial combina diferentes postulados que van desde la medicina china tradicional, movimientos extraídos de la lucha Ying Yang así como influencias de gimnasia taoísta. Si a esto se le une que la medicina moderna acoge este tipo de prácticas como apoyo incondicional para fomentar la mejora en muchos de los problemas físicos y mentales de la sociedad actual, la paliación de gran cantidad número de enfermedades se asienta como indispensable. Por qué cerrar los ojos ante aquellas terapias que nacieron hace milenios y que hoy en día continúan siendo efectivas.