El funcionario internacional explicó que recibieron quejas de algunas instituciones internacionales, como el Fondo para la Agricultura y la Alimentación de Naciones Unidas (FAO), y que, además, eran conscientes de que las asociaciones de criadores de cerdos estaban reclamando por los perjuicios ocasionados por la relación establecida entre los animales y la enfermedad.
Fukuda explicó que en sustitución de la denominación original se estaban barajando varios nombres, la mayoría con relación a un área geográfica específica, «lo que estaba creando una gran confusión, y decidimos poner un nombre que no cree estigma para nadie». Por todas estas razones, la OMS decidió llamar al virus «Haemaglutinin 1 Neuraminidase 1» (H1N1), que es la definición de la gripe estacional, y añadirle una A porque es nuevo, y porque esta letra designa el tipo de virus que tiene el potencial de convertirse en pandemia.
Consultado sobre cómo cree que el virus debería llamarse de forma corriente, dada la dificultad que representa la denominación escogida, Fukuda dijo llanamente «el nuevo H1». Y lo justificó explicando que el virus de la gripe aviar se denomina científicamente H5N1, pero de forma corriente se le denominaba «H5».