Los primeros ensayos clínicos para tratar la sordera en la infancia con células madre e implantes cocleares podrán comenzar en diez años, ha anunciado Marcelo Rivolta, director de laboratorio en el centro de Biología de Células Madre de la Universidad de Sheffield (Reino Unido).
El implante coclear permite estimular electrónicamente el nervio auditivo. En opinión de Rivolta, «dentro de muchas décadas» lo ideal será generar una prótesis biológica completa del oído, y dentro de diez años se podrían iniciar los primeros ensayos clínicos del tratamiento de la sordera en la infancia con células madre e implantes cocleares.
«Los resultados que hemos obtenido hasta ahora son promisorios», ha señalado Rivolta. Una investigación liderada por este experto ha conseguido crear -a través de la modificación de determinadas células madre del oído interno- nuevas células sensoriales capaces de recibir sonidos. Además, ha logrado también regenerar las neuronas necesarias para procesar esta información y que, finalmente, la audición sea efectiva.
La utilización de audífonos podrá iniciarse entre los tres y seis meses de edad, mientras que el de los implantes cocleares no deberá hacerse antes de los ocho meses, ya que «cuanto más joven, mayores son los riesgos». De 2 a 3 de cada mil niños nacen con perdidas de audición totales o parciales y otros pierden su audición durante los primeros años de su vida. «Para que tengan posibilidad de desarrollar el lenguaje y el habla lo mismo que niños con audición normal es imprescindible que la hipoacusia se detecte antes del mes y el tratamiento esté iniciado a los tres meses«, concluyen los expertos.