La Atención Primaria (AP) en España se enfrenta a numerosos problemas que se extienden a lo largo del tiempo. La falta de profesionales se acentuó en plena pandemia el déficit de profesionales cobra cada vez mayor velocidad como consecuencia de las jubilaciones previstas para los próximos años, así como por la fuga de cerebros a otros países. El informe Oferta-Necesidad de Especialistas Médicos 2021-2035 pone de manifiesto que la AP es la especialidad que se va a enfrentar a un mayor déficit de profesionales en los próximos cinco años. Concretamente, faltarán en torno a unos 4.500 profesionales en el año 2027 como consecuencia de múltiples factores.
La AP es la segunda especialidad con una pirámide estaría más envejecida actualmente, con los mayores porcentajes de profesionales con 60 y más años (33,2%, uno de cada tres) y de 50 y más años (60,2%).
Se prevé que España pierda 80.000 médicos por jubilación en los próximos nueve años, a una media anual de entre 7.000 y 8.000 médicos por año. La fuga de cerebros a otros países que ofrecen mejores condiciones laborales es otra de las máximas. Según el cálculo realizado por el Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos, en los últimos diez años han emigrado unos 18.000 facultativos, motivados fundamentalmente por las precarias condiciones laborales existentes en España.
La fuga de cerebros a otros países que ofrecen mejores condiciones laborales es otra de las causas
El poco atractivo en las plazas y el escaso presupuesto son otras dos realidades a las que se enfrenta el sector. Según los expertos, el presupuesto destinado a la AP es insuficiente. Las cifras indican que de cada 100 euros invertidos en Sanidad, 25 van a la AP en los sistemas europeos mientras que en España se está por menos de 15, prácticamente en la mitad de los países europeos con el mismo modelo. En los últimos diez años la hospitalaria ha crecido a un ritmo de un 30% y la AP no se ha movido ni un 10%, lo que indica que no hay una apuesta por la Primaria.
El presupuesto es común para ambas especialidades desde que existen las gerencias únicas, algo que ha supuesto una pérdida de inversión para la AP en favor de la hospitalaria.
Asistencia universal
Para tener una asistencia sanitaria universal, sostenible y coste efectiva, la mejor vía para lograrla es la AP. Hay muchas evidencias que están demostrando que la AP mejora la equidad, pero las inversiones van hacia otras cosas que son más visibles.
La formación médica de grado está dirigida a la atención hospitalaria y no a la primaria, un hecho que respaldan las cifras. Según datos ofrecidos por el Ministerio de Sanidad, del total de médicos (168.000), el 25% se dedican a la Atención Primaria, mientras que el 54% a la hospitalaria. Si el porcentaje de profesionales dedicados a la Atención Primaria se ajusta a las exigencias de la Organización Mundial de la Salud (OMS), España queda lejos de las recomendaciones, ya que el organismo que rige la salud mundial estima que debería haber entre un 40 y un 50% de médicos de Atención Primaria respecto al total.
Una de las medidas estrella para paliar esta situación es generar incentivos para que la formación médica de grado no se dirija solamente a la atención hospitalaria. A día de hoy, en España no hay ningún departamento de AP en las universidades y la asignatura suele ser optativa en la mayor parte del territorio. Hace 43 años que existe la especialidad en España y en las universidades públicas hay solamente dos catedráticos que son médicos de AP. Una vez superada la universidad, los estudiantes deben especializarse a través del sistema de formación de especialistas médicos. En la última convocatoria, las especialidades más demandadas fueron Cardiología, Dermatología y Cirugía Plástica. Sin embargo, quedaron sin cubrir 218 plazas, de las que 200 correspondían a médico de familia. Desde hace unos años, la forma de elección de plazas MIR es más complicada y el sistema informático tiene muchos fallos. El año pasado sobraron plazas y en la resolución se las dieron a extracomunitarios.