El café es considerado como uno de los principales manjares para muchas de las sociedade, de oriente a occidente. Al mismo tiempo que mueve cantidades ingentes de dinero y, de igual forma que existe una unanimidad que el café de Colombia es el más puntero. Hasta aquí, todo conocido. Pero, ¿Y si el café tuviera propiedades que curasen un cáncer?.
Quizá en la comunidad médica y de investigación, el conocimiento de que haya sustancias como el café o la marihuana que tienen un alto grado terapético, es de más sabido. Pero para la sociedad en general, no del todo.
El caso es que en el año 2005, el Journal National Cancer Institute, publicaba dos estudios cuyo efecto noticioso radicaba en el consumo de café podía disminuir el riesgo de padecer un cáncer de hígado.
El llevado a cabo por el National Cancer Center de Tokio (Japón), se llevó a cabo el examen a 334 individuos que padecían un cáncer hepatocelular (hígado), sobre una muestra poblacional de 90.000 personas con edades comprendidas entre 50 y 60 años, franja de edad en la que se suele desarrollar con mayor fuerza.
De este análisis, se descifra que la tasa de cáncer de hígado era un 50% inferior para aquellos que bebían café. Es más, puntualizan que tras lo analizado después de una década de seguimiento intermitente, cuanto más café consumían menor era el riesgo de padecer este tipo de cáncer.
En diciembre del 2008, la revista médica American Journal of Epidemiology, publicó un artículo en el que la División de Epidemiología de la Universidad de Tohoku (Japón), comprobaron que existía una estrecha relación entre la toma de café y la peligrosidad d contraer un cáncer de tipo esofágico, oral u faríngeo.
De todas formas, desde la autoría del primero de los estudios citados, se defiende que no puede ser extrapolado a todas las poblaciones puesto que el consumo del descafeinado es poco usual en Japón.
Muchos son los estudios que se llevan a cabo en el mundo de la oncología. Profesionales que trabajan para que el futuro de la medicina pueda combatir una de las enfermedades más acuciantes en la actualidad. Por ello, nadie mejor que uno de ellos para saber si, en cada uno de los casos afectados, es conveniente o no prácticas como la toma de café. Posiblemente, el tiempo dé la oportunidad de desvelar cual es su raíz y así, poder combatirla de manera tajante.