Seguramente estas noches pasadas has tenido problemas para conciliar el sueño, ya que han sido inusualmente calurosas, y esto solo es el preludio del verano que está a la vuelta de la esquina. Dormir bien cuando hace calor es prácticamente imposible, de hecho es el factor más señalado como el causante del insomnio.
Según el Doctor Guillén-Riquelme del Laboratorio del Sueño de la Cátedra UGR-LoMonaco, las altas temperaturas durante la noche alteran los ritmos circadianos del organismo y aumentan la vigilancia durante el sueño, lo que hace que nuestro descanso sea superficial y fragmentado. Tomando como queja frecuente la incapacidad de dormir debido a la temperatura, algunos estudios se han centrado en demostrar como optimizando la temperatura de la piel (que está controlada por factores externos), mejora la calidad del sueño.
Para dormir bien, ni demasiado frio ni demasiado calor
Alcanzar una temperatura de confort para conciliar el sueño es posible, solo hay que tomar una serie de medidas que te ayudarán a dormir bien:
Que corra el aire: no hay nada que de más calor, que dormir demasiado cerca de alguien. Un colchón de medidas especiales (king size o queen size) te permite tener libertad de movimientos y espacio suficiente para dormir lejos de tu pareja (si te apetece, claro).
Ducharse antes de dormir: darse una ducha templada antes de ir a la cama, puede ser una buena táctica a la hora de sentirnos más frescos.
Utilizar ropa de cama y tejidos frescos: existe ropa de cama, elaborada con textiles especiales e ideales para mantener siempre una temperatura constante. La tradicional fibra de algodón, sigue siendo la estrella para vestir la cama evitando la acumulación de calor, pero también nuevas patentes han logrado hacerse un hueco en el mercado de la ropa de cama transpirable, como es el caso de Tencel. Este tejido, fabricado a partir de la celulosa del eucalipto, es una opción ecológica, fresca, higiénica y atérmica.
El colchón: decisivo para dormir sin calor
Mención aparte merece la superficie de contacto a la hora de dormir, que debe dificultar la transferencia térmica y el consiguiente aumento de la temperatura. Por eso, debes prestar especial atención a que tu colchón cumpla esta condición.
El colchón de Criolátex® ECO10® de LoMonaco, incorpora partículas termorreguladoras de la temperatura, creadas a partir de gel, para proporcionar un frescor y transpirabilidad únicos. Además, el nuevo material Criolátex®, una evolución de los tradicionales colchones de látex, es adaptable y suave y naturalmente preparado para ofrecer el confort térmico que se necesita para dormir a pierna suelta toda la noche.
Para asegurar el termoconfort, los toppers ecoTOP y ecoTOP Plus se fusionan con el colchón, llevando lo mejor de la naturaleza a tu cama. El eco TOP con su cara de verano, incorpora lino y algodón, que convierte tu cama en un entorno único de ligereza y frescor. Por su parte, ecoTOP Plus, con las mejores lanas merino y mohair, que actúan como reguladores de la temperatura gracias al calor por absorción o refrigeración por evaporación, permite siempre el confort térmico de los durmientes.