Consejos para mejorar la salud pulmonar
El ser humano inspira y espira una media de cinco litros de aire por minuto, una cifra que oscila entre los 7200 y los 8600 litros al día, o lo que es lo mismo, un total de más de 7 millones de respiraciones al año. A través de este proceso, nuestro organismo asimila la cantidad de oxígeno necesaria para vivir y que cada una de sus células se mantenga en perfectas condiciones, a la vez que expulsa dióxido de carbono.
Dada la importancia de estas funciones, resulta esencial para nosotros conocer qué sustancias son perjudiciales para nuestros pulmones y qué actividades promueven la salud de los mismos. Sólo así tendremos la capacidad de cuidar nuestro aparato respiratorio y evitar sufrir enfermedades como la EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica).
Tal y como todo el mundo sabe, fumar es una de las causas que más problemas pulmonares ocasiona, de ahí la importancia de dejar de hacerlo, o mejor aún, de no empezar nunca. Los fumadores tienen, en promedio, 20 veces más probabilidades de desarrollar cáncer de pulmón o morir a causa de esta enfermedad. No obstante, no sólo es importante dejar todo tipo de cigarrillos, también lo es evitar estar en contacto con el humo de segunda mano, especialmente en los niños, debido a que las personas que respiran el aire que otros fumadores expulsan, repleto de toxinas y compuestos químicos, también aumentan considerablemente el riesgo de padecer enfermedades pulmonares.
Aunque evitar exponerse a la contaminación del aire fuera de casa es imposible, sí podemos realizar ciertas tareas para eliminar, en la medida de lo posible, la máxima exposición a la contaminación del aire en el interior de nuestro hogar. Para ello, vigilaremos la exposición de las mayores fuentes de contaminación, como lo son las chimeneas, las cocinas de leña, los químicos provenientes de limpiadores domésticos, pinturas, el moho o la caspa de las mascotas. Igualmente será importante la limpieza diaria y el cambio de los filtros de aire con una mayor frecuencia. Otra gran idea es adquirir plantas de interior, que convierte el dióxido de carbono en oxígeno y reducen la concentración de ozono.
Si cuidamos el tiempo que pasamos al aire libre, por ejemplo, evitando zonas muy concurridas por el tráfico, y el que pasamos en nuestra casa, también deberemos hacerlo en nuestro puesto de trabajo, eliminando la exposición a sustancias cancerígenas y contaminantes. Es esencial tomar precauciones laborales en situaciones en las que sea necesario utilizar respiradores, campanas de humo y demás dispositivos de seguridad.
Otros irritantes tóxicos para nuestros pulmones son el talco, la fibra de vidrio, el níquel y el cromo, ante la presencia de éstos, siempre se tratará de cubrir la nariz y la boca y no contenerse las ganas de estornudar en presencia de cualquiera de estas y otras sustancias desconocidas.
Hábitos para vivir más y mejor
Por otra parte, adoptar ciertas medidas de forma personal también nos ayudará a promover una salud pulmonar. Por ejemplo, el mero hecho de respirar profundamente con más frecuencia, pone en uso la plena capacidad de los pulmones para oxigenar la sangre. Reír también tiene innumerables beneficios para nuestra salud, entre ellos tener mayor sangre oxigenada al inhalar más cantidad de aire, ejercitar los músculos abdominales y aumentar la capacidad pulmonar.
La dieta y el ejercicio siempre tienen mucho que decir respecto a nuestro bienestar; mientras que el ejercicio cardiovascular facilita el transporte de oxígeno de los pulmones al corazón y a los músculos, las dietas ricas en frutas frescas y pescado se asocian a beneficios de la salud pulmonar. Esto último se aplica especialmente a enfermos de asma, EPOC y demás enfermedades comunes.
Tampoco podemos olvidar los beneficios de respirar por la nariz, que actúa como un filtro capaz de filtrar partículas tan pequeñas como un grano de polen. De aquí la importancia de mantener la nariz descongestionada en caso de alergias, resfriados y demás afecciones.
En caso de padecer asma o sentir los síntomas de cualquier otra afección respiratoria, es conveniente aducir al médico para someterse a exámenes regulares que ayuden a controlar la afección. Actualmente, las terapias respiratorias que presta Oximesa, como la ventilación mecánica, el soporte ventilatorio o la aerosolterapia, mejoran notablemente la vida de todas las personas que sufren problemas respiratorios.