Este equipo presenta un diseño de doble anillo, permitiendo al paciente disfrutar de las ventajas de un sistema abierto que aumenta el confort con la disminución de claustrofobia. Al poseer una única camilla, no hay necesidad de movilizar al paciente. Respecto a las ventajas, el TAC aporta información anatómica y morfológica que, aplicada en la patología oncológica, se utiliza para la localización y extensión del tumor. El PET utiliza el radiofármaco 18F-fluorodesoxiglucosa (FDG), proporcionando información de la función y metabolismo celular, con una alta sensibilidad y especificidad en la localización de la tumoración.
Indicaciones
Fundamentalmente, este sistema está muy indicado en patologías relacionadas con el cáncer, como en la detección precoz o extensión de la enfermedad. También en sospecha de recurrencia tumoral y en la valoración de la respuesta al tratamiento oncológico. Otras aplicaciones se relacionan con la neurología y psiquiatría, abriéndose actualmente nuevos campos en el estudio de otros biomarcadores. En lo que se refiere a la duración de la prueba, al paciente se le administra el radiofármaco, permaneciendo en reposo aproximadamente una hora hasta su distribución completa por el organismo. Para la obtención de las imágenes puede que en algunos casos sea conveniente la inyección de contraste, mejorando ostensiblemente la calidad de la visualización de las estructuras anatómicas en el TA C. Seguidamente, se realiza el estudio de PET con una duración aproximada de 15 minutos. En ocasiones, para obtener una más amplia información, se adquiere una imagen tardía de una zona anatómica concreta. El radiofármaco se incorpora a las células por el mismo mecanismo de transporte de la glucosa, no siendo tóxico ni produciendo ningún tipo de alergias ni efectos secundarios. Una prueba, en resumen, indolora, cómoda y de excelentes resultados.