La cúrcuma es una especia aromática que se usa para condimentar platos en la cocina pero que también tiene propiedades medicinales. Proviene de la raíz de una planta herbácea perteneciente a la familia de las ‘zingiberáceas’, conocida científicamente como ‘Curcuma Longa’, y es originaria de la India e Indonesia, por lo que es muy usada como especia en la gastronomía del sudeste asiático. Se identifica por su color amarillo intenso (es ella quien aporta este color al curry) y su olor.
La curcumina, la demetoxicurcumina y la bisdemotoxicurcumina son los compuestos de esta especia que le otorgan propiedades medicinales. Además, sus aceites (turmerone, atlantone y zingiberene), sus proteínas, resinas y azúcares contribuyen a un efecto positivo en la salud.
Beneficios de la cúrcuma
- Su efecto antioxidante y antigregante plaquetario puede prevenir la aparición de dolencias cardiacas si se toma de manera regular. La curcumina y otros de sus activos detienen la oxidación celular en órganos como hígado, riñón o corazón.
- Reduce las concentraciones de triglicéridos y colesterol “malo” (LDL) en la sangre.
- Tiene propiedades cicatrizantes.
- Sirve como antiinflamatorio y anelgésico: gracias a su efecto antiinflamatorio ayuda a controlar enfermedades como la artritis, la pancreatitis, la gastroenteritis y el síndrome del colon irritable.
- Trata los síntomas de alteraciones digestivas (como flatulencias o digestiones pesadas) gracias a su capacidad de aumentar la secreción de flujo biliar.
- La curcumina tiene gran capacidad para metabolizar las grasas. Puede limitar la extensión del tejido graso y por ello es útil para perder peso.
- Tiene efecto descongestionante a nivel hepático, ya que restaura las células del hígado y ejerce una protección sobre él.
Además se ha estudiado su uso en tratamientos antitumorales para reducir la aparición de células cancerígenas. Dichos estudios han mostrado que quienes consumen cúrcuma tienen un menor riesgo de padecer cáncer de mama, próstata, pulmón o colon. Algunos estudios también apuntan que puede tener capacidad neuroprotectora frente a trastornos como la depresión y la pérdida leve de memoria.
Efectos negativos de la cúrcuma
A pesar de todos los beneficios que puede tener la cúrcuma, hay que consumirla en cantidades moderadas por el alto contenido en micotoxinas. Además conviene que las mujeres embarazadas y personas con problemas en la vesícula biliar se abstengan de tomarla. No se debe usar con tratamientos para expulsar piedras del riñón ya que puede producir cólicos. A pesar de sus propiedades antiulcerosas y hepatoprotectoras, si se toma en exceso puede ocasionar irritación gástrica y formar úlceras por la alteración de las mucosas digestivas.
Su consumo puede afectar a la coagulación sanguínea, por lo que no se debe tomar si se está en tratamiento con medicamentos para las varices, problemas de corazón o mala circulación sin antes preguntar al médico. Asimismo, aunque es cierto que puede tratar algunos problemas hepáticos, no es apropiada para todas las dolencias del hígado, por lo que es conveniente consultar al especialista en estos casos.
A pesar de todos sus beneficios, conviene siempre tener en cuenta que se trata de una planta y, por tanto, no puede sustituir a ningún tratamiento médico. Por ello hay que tomarla de forma moderada siempre que nuestra salud lo permita, y su ingesta debe ser controlada por un médico en caso de padecer enfermedades graves.