Si se localiza en estómago, se denomina úlcera gástrica. El revestimiento del estómago y del intestino delgado protege contra los ácidos irritantes producidos en el estómago.
Si este revestimiento o mucosa protectora deja de funcionar correctamente, ocasiona inflamación (gastritis) o úlcera; por tanto, es el resultado de un desequilibrio entre los factores agresores y defensores de la mucosa gástrica.
Si las úlceras atraviesan por completo la pared del estómago o duodeno, se denomina perforación y es una emergencia médica.
¿A quiénes afecta?
Es una enfermedad frecuente que afecta al 10 por ciento de la población en algún momento de su vida. Sin embargo, debido a los eficaces medicamentos que existen para tratarla, la mortalidad es escasa.
Sus causas
La causa más común de este daño es una infección por la bacteria llamada Helicobacter Pylori, que la mayoría de las personas con úlceras pépticas tienen colonizando en su tracto gastrointestinal. Otros factores que aumentan el riesgo de padecer úlceras son:
* Uso diario de ácido acetilsalicílico (aspirina), ibuprofeno u otros antinflamatorios no esteroideos (AINES). Tomar estos fármacos de vez en cuando es seguro y no aumenta el riesgo de desarrollar úlceras.
* Fumar.
* Ingerir demasiado alcohol.
* Padecer una enfermedad crónica y debilitante.
* Factores genéticos.
* Existe controversia sobre el estrés como causante de úlcera péptica.
Sus síntomas
El síntoma más frecuente es dolor abdominal (parte superior del abdomen) que puede describirse como corrosivo, que aparece entre 1,5 y 3 horas después de las comidas y que alivia con los alimentos o antiácidos. Incluso puede ser un dolor que despierta a la persona por la noche entre las doce y las tres de la madrugada. El dolor está inducido por el ácido.
Otros síntomas son: la existencia de reflujo gastroesofágico, ardores o acidez, náuseas, vómitos y pérdida de peso. También hay pacientes con úlcera que no tienen síntomas. Puede seguir una evolución con agudizaciones de semanas o meses de duración que se alternan con periodos en los que no se manifiesta.
¿Cómo se actúa ante la sospecha clínica de úlcera péptica?
Ante la sospecha clínica, el diagnóstico definitivo se obtiene mediante estudio endoscópico y toma de muestra del tejido ulceroso (biopsia). Una vez confirmado el diagnóstico, el tratamiento consiste en la combinación de terapia antibiótica para eliminar la bacteria H. Pylori y para reducir la presencia de ácido en el estómago.
Las úlceras pépticas tienden a reaparecer sin tratamiento. Si se sigue las instrucciones de tratamiento dadas por el médico, la infección se resolverá en un elevado porcentaje de casos y tendrá muchas menos probabilidades de desarrollar otra úlcera.
Medidas de prevención
* En cuanto a la dieta, la única recomendación es evitar aquellos alimentos que producen síntomas; como son comidas condimentadas o con exceso de grasas.
* Se ha demostrado la utilidad del tratamiento antisecretor con los inhibidores de la bomba de protones (el primer fármaco de este grupo que salió al mercado es el Omeprazol) para la prevención de úlceras en aquellos pacientes de riesgo.
* No fumar.
* Limitar la ingesta de alcohol y café.
* Evitar el consumo continuado de ácido acetilsalicílico (aspirina), el ibuprofeno y otros AINES. En lugar de estos, pruebe con paracetamol. Si tiene que tomar estos medicamentos, consulte primero con el médico.